"PASEANDO POR LA ALFRANCA" (Entrada 1-2024))

Desde las altas montañas
va buscando su destino,
cabalgando en aguas bravas
o en remansos más tranquilos.
Fundida en límpidas aguas,
que avanzan con gran sigilo,
siente las voces calladas
y los anhelos del río.
Y al fin sus sueños alcanza
y el sueño se hace camino,
el galacho de La Alfranca
con su hermoso recorrido.
Verdes bañados de plata,
marrones y grises fríos,
rojos de hojas y bayas
y blancos puros y limpios.
Vega fértil y lozana,
cañas, juncos y carrizos,
alfombran la bella estampa
de éste magnífico sitio.
Otoño frío que empapas
las mañanas de rocío
y vas dejando mojadas
las acacias y los pinos.
Calienta el sol en las ramas
al tímido pajarillo,
que, como cada mañana,
nos regala bellos trinos.
Río que empuja y avanza
rompiendo el suave latido
de un corazón que no alcanza
a comprender su destino.
Rio que busca esperanza
y en su caminar cautivo,
la verde tierra amamanta
para que broten los lirios.
Los dioses, a semejanza,
de la beldad del Olimpo,
dispusieron en La Alfranca
un jardín a su servicio
y así, las mas bellas plantas,
tapizaron éste sitio,
para llenar de alabanzas
sus bosques y sus caminos.

Texto: José Manuel Trullén