"QUIMERA Y LAMENTO"

¿Qué es lo que lleva al poeta
a construir nuevos versos?
¿Las estrellas?, ¿Los planetas?,
¿El sol, la luna, el deseo...?
Todo lo que nos rodea,
cualquier acontecimiento,
es fuente de inspiración,
para crear algo nuevo.
Dia y noche son hermosas,
eligiendo su momento.
Odio y amor nos empujan
a sesudos parlamentos
o a insignificantes rimas
nacidas de los adentros.
Vida y muerte, llanto y risa,
estrépitos y silencios,
acompañan nuestros pasos
de la cuna al cementerio.

Cuánta muerte hay en la vida,
dolor, pena y sufrimiento.
Hambre, miserias y guerras,
conflictos entre los pueblos.
Agotamos los recursos
y esquilmamos nuestros suelos
mientras gozamos felices
para ocultar nuestros yerros.
Y cuánta vida en la muerte,
cincelada con esmero
en tumbas y camposantos,
en catedrales y templos,
en cuadros y en esculturas,
en oraciones y rezos.

Vida que llama a la vida
desnudándola de miedos
cual notas de partitura
arrancando un bello arpegio.

Vida sin muerte es quimera.
Muerte sin vida es lamento.
Una alimenta a la otra
pues ambas son complemento
recíproco, incuestionable,
como el amor y el tormento.